INTERPRETACIÓN DE UN SUEÑO MALÉFICO.

En una de las décimas de la obra LA VIDA ES SUEÑO, Calderón de la Barca pone en labios de SEGISMUNDO el siguiente lamento:

¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.

Los sueños, sueños son. Pero, ¿acaso sueñan las brujas? Digo, porque hasta donde yo sé, para soñar en serio hace falta dormir. Y si las brujas pasan la vigilia volando en sus escobas (aunque RORMROD diga que fue un eclipse, hace pocos días estas mujeres ennegrecieron la Luna por el alto nivel de "tráfico escobil" que se produjo en una de las hora pico) y en el día realizan su doble vida para pasar desapercibidas entre los mortales, ¿cuándo tienen tiempo para acurrucarse en los brazos de Morfeo?

Veamos que más nos dice SEGISMUNDO, en su soliloquio de desventura:

Sueña el rey que es rey, y vive
con este engaño mandando,
disponiendo y gobernando...

Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece...

...sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende...

Como el lector podrá ver, por ningún lado dice este dramaturgo del Siglo de Oro español, que las brujas sueñen. Entonces, ¿cómo interpretar el hecho de que MALÉFICA nos diga que tuvo un sueño? El materialismo histórico nos enseña que todos los actos del ser humano están signados, dictados y limitados por la situación económica del momento en que éste vive. Y MALÉFICA no podía ser la excepción. La realidad es, que MALÉFICA no tuvo un sueño como tal, sino que sufrió una intoxicación por el uso de una pócima en mal estado y no fue precisamente la number nine. Tampoco fue por una lumpia. Estoy seguro de eso, pues se lo pregunté a Aristóbulo.

¿Y cómo entender que una bruja llegue al extremo de descuidarse y dejar que el caldero se le contamine? Bueno, ya lo dije: materialismo histórico. Estamos viviendo una situación económica, en que hasta las brujas se han visto en la necesidad de hacer uso de hierbas y brebajes de dudosa procedencia. Como todos ustedes saben (y si no lo saben les informo) MALÉFICA firmó. Sí, firmó, y por consiguiente le está vedado acudir a un MERCAL y hacer cola durante 3 horas para que al final le digan que no hay na'. Tiene, por consiguiente, que acudir al estraperlo para proveerse de los condumios (si es que cabe la expresión) propios de la cesta básica de una bruja, y atenerse a la calidad de lo que encuentre, dada la extraña triangulación cubana en el mercadeo de muchos de estos productos. ¿Estarán los babalaos metidos en un guiso?

Sueño, desvarío o alucinación, aquí va la interpretación de “El sueño de una noche de verano", pero...by MALÉFICA:

El joven (moreno, alto, de cabello negro y corto) que es rescatado en el mar, no es más que el futuro de Venezuela, el cual hace tiempo que se encuentra a la deriva en la zona más septentrional del Mar de Las Antillas.

El gentío que conversa y hace comentarios (me imagino que insulsos) en torno a la situación del ahogado, no es más que ese cúmulo de organizaciones burocráticas internacionales (buenas para nada) pero que resultan las delicias de esos periodistas que no hallan como llenar la cuartilla del día (léase: OEA, ONU, HRW, SIP, OIT, AI, UE; amén de un largo etcétera de aguerridas, contestarias y bolivaristas ONGS).

El evento de la carne resulta confuso para mí. Hace tiempo que no veo la carne ni en pintura. Por consiguiente, no logro entender como alguien la puede visualizar en sueños. En todo caso, esta bruja nos da una verdadera lección de “cultura sibarita” al decirnos que las costillas se le antojaron de cordero. Habla de carne en abundancia, adobada, asada, cortada y servida. Esto no es más que la chequera. Sí, la chequera que ya no sólo camina por América Latina, el Bronx, y Londres, sino que lleva varios descarados coqueteos con países de África y Asia (próximamente Oceanía y la Antártida) repartiendo petrodólares, cuyo origen (venta del petróleo) permite que tanto el enemigo imperialista como el gobierno nacional, gocen de buena salud. Como buena venezolana, MALÉFICA no entiende cómo es que otros se sacian, mientras que aquí (país petrolero) ya ni gas se consigue. Es por eso, que en su sueño pensó en llevarle carne a su consorte TOPOCHO. ¿Acaso no había ingentes cantidades de carne tapizando la mesa? ¿Por qué no iba ella a disfrutar también del festín? Pero, aunque ahora Venezuela es de todos, no son todos los que administran su riqueza. De ahí que MALÉFICA haga referencia a que en un descuido, al regresar, vio con estupor que las toneladas de carne, que hace un momento desbordaban los bordes de la mesa, habían desaparecido. Es decir, “ese barbarazo acabó con to'o”.

Su subconsciente no logra internalizar tan cruda realidad, razón por la cual éste despierta a MALÉFICA. A esta señora, no se le ocurre mejor catarsis que venir a su blog a contarnos la profecía, para que seamos sus lectores quienes ahora experimentemos horrendas pesadillas. Como aquella, de preparar un post para intentar interpretar los sueños de una bruja.

HUMOR -VENEZUELA

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